jueves, 8 de mayo de 2008

Dragon Chino

Mitologia China

Dragones Chinos o dragón chino es como se conocen a estas maravillosas criaturas orientales. Símbolos de poder en el folklor y arte chino, son seres inteligentes y sabios y también son vistos como la representación del concepto del yang y asociados como los proveedores de la lluvia y el agua en general.


El dragón es utilizado en el Oeste como emblema nacional de China. Sin embargo, el uso dentro del mismo Oriente es raro. Primero se utilizó al dragón como símbolo del Emperador, hasta que fue utilizado como bandera nacional por el último de la dinastía Qing. Dado que el dragón chino manifiesta sensaciones de guerra, y dado que el gobierno Chino ha querido evitar conflictos, un panda gigante es ahora utilizado como emblema nacional.

Varios proverbios chinos hacen referencias al dragón. Por ejemplo, "esperar que un niño se convierta en dragón", es una frase de buena suerte.

Se ha hecho una asociación de los dragones con los pescados y se remonta a una leyenda que cuenta que un pez-carpa saltó sobre la “puerta mítica del dragón” y se convirtió en este animal fantástico; de hecho, varias cascadas y cataratas de China son consideradas como lugares donde se localiza la Puerta del Dragón. La historia es empleada como alegoría del impulso y del esfuerzo necesarios para superar obstáculos y alcanzar el éxito. Esta misma alegoría fue aprovechada y utilizada recientemente por el animé japonés, cuando el dragón Shiryu –uno de los Caballeros del Zodíaco de bronce– se enfrenta al desafío de mo
dificar el curso de la corriente de una catarata ubicada en la región de los Cinco Picos.

Una hipótesis alternativa sugiere que los primeros dragones chinos fueron especies de cocodrilo. Específicamente, del Crocodilus Porosis, un animal antiguo y gigante. Se sabe que los cocodrilos detectan cambios climáticos como la presión del aire y que pueden percibir cuándo sobrevendrán lluvias. Éste pudo haber sido el origen de las cualidades míticas atribuidas al dragón para controlar el tiempo, especialmente la lluvia. Además, existen evidencias de la veneración de cocodrilo en civilizaciones babilónicas, indias y mayas.

Imagenes influyentes en la civilizacion china




miércoles, 7 de mayo de 2008


La leyenda de Hua-Shan:

El monte de los Inmortales


Refugio milenario de los taoístas, Hua-Shan simboliza mejor que ningún otro monte chino una doctrina sustentada en rígidas prácticas mentales y físicas dirigidas hacia un objetivo último: la inmortalidad.
"Cerca de la cumbre del Monte Hua-Shan, me encontré con una inscripción en una roca que decía: 'Todo aquel que sobrepase este punto se convertirá en medio inmortal'. Seguí subiendo penosamente. Sin embargo, dudo de si volveré a tener la fuerza o la valentía de ascender de nuevo el Monte Hua-Shan para ver si puedo inmortalizar mi otra mitad".
Así describía el escritor norteamericano Foster Stockwell la ascensión que realizó al monte Hua-Shan en 1983.
Muchos otros viajeros occidentales que han conseguido coronar los cuatro picos de esta escarpada montaña también han comprobado la dificultad de la ascensión y experimentado la rara sensación de "convertirse en medio inmortal", aun sin estar iniciados en taoísmo ni saber nada de la mencionada inscripción. No en vano, a medida que se asciende por este emblemático monte, parece que uno estuviera llevando a cabo una de las tareas más arduas de su existencia. Escaso esfuerzo comparado con el efectuado por los monjes taoístas que, orgullosos de prosperar con las privaciones y las dificultades, han construido en las empinadas laderas magníficos templos y un largo sendero hasta la cima, una auténtica escalera que partiendo del mundo permite identificarse con la vía celeste (T'ien-tao) y rozar el espíritu del Tao, causa permanente del devenir universal y del mundo fenoménico que procede de él y vuelve a él.

Dinastias




Dinastía Shang


La dinastía Shang (1600 adC - 1046 adC), también conocida como dinastía Yin (殷), es la segunda dinastía en la historia de China y la primera cuya existencia histórica está documentada. Su extensión territorial abarcaba el valle del río Amarillo.
La dinastía Shang siguió a la legendaria dinastía Xia y precedió a la dinastía Zhou (1122 adC - 256 adC). Hasta el siglo XX, no existían pruebas de su existencia real, ya que todas las menciones a los reyes Shang aparecen en obras chinas escritas muchos siglos después, durante la época Zhou. Sin embargo, numerosos descubrimientos arqueológicos realizados a lo largo del siglo XX confirmaron la existencia de esta dinastía y la fiabilidad de los textos de la época Zhou. Los principales hallazgos arqueológicos en el valle del Río Amarillo que han confirmado la existencia de los reyes Shang son los objetos rituales de bronce y, muy en especial, los huesos oraculares, caparazones de tortuga y omóplatos de animales sobre los que se escribían predicciones oraculares.
Estos huesos tenían típicamente tres secciones: una pregunta para el oráculo, la contestación del oráculo, y el resultado que reflejaba si el oráculo tenía razón. Los huesos son a menudo de ganado, bueyes o monos, pero nunca de gatos o perros. Estos textos escritos en los huesos oraculares son la forma más antigua que se ha conservado de la escritura china y han desempeñado un papel fundamental en las investigaciones recientes sobre el origen y desarrollo de los caracteres chinos. La información proporcionada por los huesos oraculares provee una visión privilegiada de las primeras etapas de la civilización china sobre variados aspectos, como política, economía, cultura, religión, geografía, astronomía, calendario, arte y medicina.
Sima Qian dice en sus Memorias históricas que la dinastía Shang trasladó su capital seis veces. El último y más importante traslado, a la ciudad de Yin (殷) en 1350 adC, condujo a la época dorada de la dinastía. De hecho, a esta etapa de la dinastía se la llama a veces época Yīn. Históricamente, el término dinastía Yin ha sido sinónimo de dinastía Shang, aunque últimamente se ha utilizado para referirse a la última mitad de Shang.
El emplazamiento de la capital de Yin, las ruinas de Yin, está cerca de la actual ciudad de Anyang. Los trabajos arqueológicos llevados a cabo allí sacaron a la luz once tumbas reales sin descubrir de los Yin y los cimientos del palacio y los sitios de culto, todos ellos conteniendo armas de guerra. Varios miles de objetos de bronce, jade, piedra, hueso y cerámica se obtuvieron. El trabajo del
bronce atestigua el alto nivel de esta civilización. También fueron encontrados más de 20.000 huesos oraculares. Muchos caracteres chinos encontrados en las inscripciones de las ruinas de Yin aún siguen en uso hoy en día.
Se especula que la dinastía Shang fue fundada por un líder rebelde que destronó al (aún legendario) último gobernante Xia. Su civilización estaba basada en la agricultura, complementada por la caza y la ganadería.
Una línea hereditaria de gobernantes Shang controló la mayor parte del norte de China, luchando sus tropas frecuentemente con asentamientos vecinos y pastores nómadas de las estepa del Asia interior. Las capitales, particularmente Yin, eran builliciosos centros de vida cortesana. Los rituales de la corte para propiciar a los espíritus y para honrar a los ancestros sagrados estaban altamente desarrollados. Además de su posición secular, el rey fue la cabeza del culto hacia los antepasados y los espíritus. Las evidencias de tumbas reales indican que miembros de la realeza fueron enterrados con artículos de valor, presumiblemente para su uso en la otra vida. Quizás por esa misma razón, cientos de plebeyos, que podrían haber sido esclavos, fueron enterrados vivos con el cadáver real.
Shang Zhou, el último rey Yin, se suicidó después de que su ejército fuera derrotado por el pueblo Zhou. Las leyendas dicen que su ejército le traicionó uniéndose a los rebeldes Zhou en la batalla decisiva. La novela clásica Fengshen yanyi trata de la guerra entre los Yin y los Zhou, en la que cada grupo era apoyado por un conjunto de dioses.



Dinastía Zhou



La dinastía Zhou fue una dinastía china que gobernó entre alrededor de 1050 adC y 256 adC. Es la tercera dinastía china en la historia tradicional, y la segunda, tras la dinastía Shang, de la que existe constancia por fuentes escritas de su época. La dinastía Zhou fue la última de las dinastías de reyes anteriores a las dinastías imperiales. En esta época vivieron los grandes pensadores chinos de la antigüedad, como Confucio, y se inició la literatura china clásica.La época Zhou puede dividirse en dos periodos bien diferenciados: Los Zhou occidentales hasta el año 771 adC, que gobernaron un estado fuerte y centralizado desde las capitales de Hào (鎬) y Fēng (豐); y los Zhou orientales, entre 771 adC y 256 adC, que mantuvieron un poder puramente simbólico o nominal desde la corte de Chéngzhōu (成周, cerca de la actual Luoyang). Esta segunda etapa, en que la unidad simbólica del reino coincidía con la existencia de múltiples estados de hecho independientes, se subdivide tradicionalmente en dos periodos: el periodo de las Primaveras y los Otoños y el periodo de los Reinos Combatientes.
Orígenes de los Zhou

El pueblo Zhou era un pueblo diferente de los Shang. Provenientes del oeste, se enfrentaron en una guerra con los Shang, derrotando a éstos en la batalla de Mùyě. Este suceso, que podría considerarse uno más de entre muchos acontecimientos bélicos similares que se produjeron en el norte de China en la antigüedad, ha sido ampliamente narrado en las fuentes chinas y se interpretó como un traspaso de poder de una dinastía corrupta a una nueva dinastía de reyes virtuosos. Esta visión responde a un concepto introducido en el pensamiento chino durante la época Zhou: El mandato del cielo (天命 tiānmìng), la legitimidad de gobierno concedida por el Cielo (considerado una deidad en esta época) a una clase de dirigentes virtuosa que gobernaba con justicia. Desde esta visión legitimista, los últimos reyes Shang aparecen como reyes crueles y corruptos, mientras que los primeros reyes Zhou habrían sido justos y sabios. Merecen una mención especial los tres primeros gobernantes conocidos de los Zhou: El Rey Civilizador o de la Cultura (文王 Wénwáng), rey sabio que murió antes de la victoria frente a los Shang; el Rey Guerrero (武王 Wǔwáng), que completó la estrategia del Rey Civilizador y consiguió la derrota definitiva de los Shang, convirtiéndose en el primer rey de los Zhou como dinastía; y el Duque de Zhou (周公 o 周公旦 Zhōugōngdàn), hermano del anterior que gobernó como regente tras la muerte de aquél y consolidó el poder de los Zhou. Este último sería considerado en los textos confucianos como ejemplo de caballero virtuoso.En esta época aparecen las obras más antiguas de la literatura china. Las ideas del Duque de Zhou sobre el buen gobierno de un estado aparecen recogidas en el libro clásico Shàngshū (尚書), también llamado Shūjīng (書經) o, en español, el Clásico de los Documentos. También se han atribuido al Rey Civilizador y al Duque de Zhou pasajes antiguos del Yìjīng (易經) o Clásico de las Mutaciones y del Shījīng (詩經) o Clásico de las Odas. Tales atribuciones son legendarias y resulta difícil determinar qué partes de estos libros, muy reelaborados por la tradición posterior, se remontan realmente a esa época. En todo caso, son estos libros, de importancia fundamental en la historia cultural china, los que han dado a este periodo fundacional de los Zhou una relevancia máxima en la historiografía tradicional china.Respecto al origen geográfico del pueblo Zhou, se sabe que atacaron a los Shang desde el oeste por lo que tradicionalmente se ha considerado que su región ancestral debía estar en la zona alta del Río Amarillo, en la actual provincia de Shanxi. En 1931 el historiador Qián Mù (錢穆) presentó su tesis de que el origen de los Zhou estaría más al este, en la actual provincia de Shanxi. Esta hipótesis se ha visto reforzada por descubrimientos arqueológicos posteriores. Además, el origen ancestral de los Zhou en Shanxi explicaría el apego que sentían los reyes Zhou por el río Fen, afluente del Río Amarillo al este de la corte de Hao. En cualquier caso, el debate sobre el origen territorial de los Zhou continúa abierto en la actualidad.

Caída de los Zhou occidentales :

En el año 771 adC, una alianza formada por el estado vasallo de los Shēn (申) y el pueblo nómada de los Quǎnróng (犬戎) lanza un ataque contra la corte de Hao, en el que muere el duodécimo monarca Zhou, el rey You (幽王 Yōuwáng). El ataque se debió a que el rey You había repudiado a su esposa, hija del marqués de Shen, sustituyéndola por una concubina.
El sucesor del rey You, el rey Ping (平王 Píngwáng), acaba trasladando la corte, en el año
722 adC, a un lugar más seguro, más al este, en Chengzhou, cerca de la actual Luoyang. Sin embargo, la corte Zhou (Zhou orientales a partir de ahora) ya no controla de manera efectiva el territorio. Su autoridad teórica será aún respetada pero, en la práctica, el territorio se verá dividido en estados independientes dirigidos por soberanos que se enfrentarán a menudo entre ellos. Estos enfrentamientos se convertirán en guerras habituales en el periodo de los Reinos Combatientes. En esta época, uno de los estados, el de Qín (秦) se convertirá en el más poderoso.

Caída de los Zhou orientales :

En el año 256 adC el ejército de Qin destruye la corte Zhou, derrocando al último rey, el rey Nan (赧王 Nǎnwáng). 35 años más tarde, en 221 adC el soberano de Qin consigue someter a los demás estados bajo la nueva dinastía Qin y asume el nuevo título de "emperador" (皇帝 huángdì), convirtiéndose en el Emperador Inicial (始皇帝 Shǐ Huángdì), más conocido en la actualidad como Qin Shi Huang.


Dinastía Qin


La dinastía Qin gobernó China desde el año 221 adC hasta el 207. El nombre Qín, que tiene una pronunciación similar en castellano a "chin", es uno de los posibles orígenes de la palabra China. La unificación de China en el 221 adC bajo el primer emperador Qin Shi Huang, este nombre podría traducirse como "El augusto emperador fundador de los Qin" marcó los comienzos de la China imperial, periodo que duró (con ciertas interrupciones) hasta la caída de la dinastía Qing en 1912. La dinastía Qin dejó el legado de un centralizado y burocrático estado que sería continuado en dinastías sucesivas.Una parte importante de lo que hoy en día forma la actual China fue unificada por primera vez en el 221 adC. Fue en ese año en el que la frontera occidental del estado de Qin, el más agresivo de los Reinos Combatientes, subyugó al último de sus estados rivales poniendo fin a ese periodo.
El rey de Qin, Zheng, se autoproclamó "Primer Emperador", una fórmula de títulos reservada anteriormente para deidades y los
mitológicos gobernantes de China. Es conocido por los historiadores como Qin Shi Huang, primer emperador de Qin. Su deseo era que los sucesivos gobernantes de china la gobernaran con los títulos de "Segundo Emperador", "Tercer emperador", etc.En el proceso de consolidación de su poder, Qin Shi Huang impuso el sistema burocrático no hereditario y centralizado del estado de Qin sobre su nuevo imperio en lugar del sistema feudal de la anterior dinastía Zhou. El imperio de Qin se apoyaba en la filosofía del legalismo (con hábiles consejeros como Han Fei o Li Si). La centralización, obtenida a través de métodos despiadados, se enfocaba en estandarizar los códigos legales y los procedimientos burocráticos, la moneda, el sistema de escritura y los patrones de pensamiento y estudios. Los caracteres utilizados en el antiguo estado de Qin se convirtieron en el estándar para todo el imperio. La longitud del eje de las ruedas de los carros también se unificó y las vías para vehículos (馳道) estandarizadas para facilitar el transporte a lo largo del país. Para silenciar las críticas contra el mandato imperial, el emperador expulsó o condenó a muerte a muchos estudiosos confucianos que disentían, y confiscó y quemó sus libros (焚書坑儒).Para evitar alzamientos futuros, Qin Shi Huang ordenó confiscar las armas y almacenarlas en la capital. Con el objetivo de prever el resurgimiento de los señores feudales, también destruyó los muros y fortificaciones que habían separado previamente a los seis estados. Se ideó un servicio militar nacional: todo varón entre las edades de diecisiete y sesenta años era forzado a servir un año en el ejército. El engrandecimiento de Qin fue apoyado por las frecuentes expediciones militares que avanzaban por las fronteras del norte y del sur. Para repeler la intrusión de los pueblos nómadas (principalmente contra los xiongnu en el norte) las murallas de las fortificaciones construidas por los Reinos Combatientes se unieron para convertirlas en una sola; esto fue un primer precursor de la Gran Muralla China de 5000 km de largo construida posteriormente durante la dinastía Ming. Varios proyectos de obras públicas, incluyendo canales y puentes, también se emprendieron para consolidar y reforzar el mandato imperial. Una extravagante tumba para el emperador, completada con los guerreros de terracota, se construyó cerca de la capital Xiangyang, una ciudad a media hora de la moderna Xi'an. Esta actividades requerían de enormes desplazamientos de mano de obra y recursos, por no mencionar las necesarias medidas represivas.El trabajo sin fin en los últimos años del reinado de Qin Shi Huang comenzó a provocar un descontento extendido. Sin embargo, el emperador fue capaz de mantener la estabilidad gracias a su firme control en cada aspecto de la vida de los chinos.
Qin Shi Huang .
Durante su reinado Qin Shi Huang hizo cinco viajes de inspección por el país. Durante su último viaje con su segundo hijo Huhai (胡亥) en el 210 AC, Qin Shi Huang murió repentinamente en la prefectura de Shaqiu. Huhai, siguiendo el consejo de dos altos oficiales - el secretario imperial Li Si (李斯) y el jefe eunuco Zhao Ghao (趙高) - falsificó el testamento del emperador. El falso decreto ordenaba que el primer hijo de Qin Shi Huang, el heredero Fusu (扶蘇), se suicidara, nombrando en su lugar a Huhai como el próximo emperador. El decreto también arrebataba la dirección de las tropas del militar Meng Tian (蒙恬) - un fiel partidario de Fusu - y sentenciaba a la familia de Meng a muerte. Paso a paso, Zhao Ghao se apoderó del poder de Huhai, conviertendole en efecto en un emperador títere.A los tres años de la muerte de Qin Shi Huang, las extendidas revueltas de los campesinos, presos, soldados y descendientes de los nobles de los seis Reinos Combatientes surgieron por toda China. Cheng Sheng (陳勝) y Wu Guang (吳廣), dos de un grupo de 900 soldados asignados para la defensa contra los Xiongnu, se convirtieron en los líderes de la primera revolución de plebeyos.A comienzos de Octubre del 207 AC Zhao Ghao obligó a Huhai a suicidarse y le reemplazó con el hijo de Fusu, Ziying (吳廣). Hay que hacer notar que el título de Ziying era "rey de Qin" para reflejar el hecho de que Qin ya no controlaba por más tiempo la totalidad de China. La contención Chu-Han fue el resultado. Ziying no tardó en matar a Zhao Ghao y se rindió a Liu Bang en los comienzos de diciembre del 207 AC. Pero Liu Bang fue forzado a ceder Xiangyang y Ziying a Xiang Yu. Xiang Yu mató entonces a Ziying e incendió el palacio a finales de enero del 206 AC. De esta manera la dinastía Qin llegó a su final, tres años después de la muerte de Qin Shi Huang, y menos de veinte años después de ser fundada.Aunque que la dinastía Qin fue de corta vida, su gobierno legalista tuvo un profundo impacto en las posteriores dinastías chinas. El sistema imperial que se inició durante la dinastía Qin creo un esquema que se desarrolló durante los siguientes dos milenios.



jueves, 1 de mayo de 2008

La Gran Muralla China mide 6.400 kilómetros y fue construida para evitar el paso de ejércitos enemigos.

Está formada por una serie de murallas construidas y reconstruidas por varias dinastías durante más de 1.000 años. Su forma actual se debe a la Dinastía Ming.

El formidable tamaño y la historia detrás de su construcción han hecho que sea considerada como una de las siete nuevas maravillas.

Según la Wikipedia, ha habido cuatro grandes renovaciones:

  1. en 208 adC por la dinastía Qin
  2. durante el siglo I por la dinastía Han
  3. entre 1138 y 1198 en el Período de las cinco dinastías y los diez reinos
  4. en 1368 por la dinastía Ming

La muralla tiene torres de vigilancia desde donde centinelas vigilaban el paso de enemigos. Allí mismo vivían y en muchas ocasiones morían. Se comunicaban por señales de humo, alertando a las tropas de las invasiones de la tribus nómadas del norte.

La parte visitada por los turistas está preservada e incluso algunos trayectos se han reconstruído. Pero debido también a su gran tamaño la mayor parte está descuidada y sirve de fuente de piedras para construcción de casas, para espacio de juego y hasta graffitis. Existe una Asociación Gran Muralla China cuyo fin es preservar este monumento de enormes proporciones.

Se dijo por mucho tiempo que la Gran Muralla China era la única construcción visible desde la Luna, e incluso trascendió a libros de texto en China. Esto ha sido descartado por expertos que señalan que la construcción es más delgada aún que muchas carreteras. No obstante sí ha sido vista y fotografiada desde el espacio, aunque se requiere buen clima, iluminación idónea y saber a dónde debe dirigirse la mirada.